Este término, que el Diccionario de la lengua española define como ‘elevación del nivel general de precios’, muy utilizado en los últimos tiempos y no precisamente por razones positivas, se escribe con una sola c. Sucede lo mismo con otra palabra de uso frecuente: objeción. No existe *objección.
- La crisis energética derivada de la guerra en Ucrania ha disparado la inflación.
- Como nadie ha puesto ninguna objeción, mantenemos las fechas previstas para los exámenes.